Un informe elaborado a partir de datos del Servicio de Epidemiología del Hospital General de Agudos Dr. Oscar Alende (HIGA) reveló un fuerte aumento de los siniestros viales en el partido de General Pueyrredon y esto volvió a poner en agenda la necesidad de políticas públicas sostenidas de prevención y seguridad vial.
Según el relevamiento, en los primeros 11 meses de 2025 se registraron 2.034 ingresos por lesiones vinculadas a siniestros viales, lo que representa un incremento del 44% respecto de 2023, último año con información pública disponible del Observatorio de Seguridad Vial del Municipio. Desde entonces, no se difundieron nuevos datos oficiales por parte del Observatorio de Tránsito municipal.
El informe del HIGA señala además que los siniestros viales constituyen hoy la principal causa de ingresos por lesiones externas al hospital, con un impacto significativo sobre el sistema de salud: el 36,9% de las personas lesionadas requirió internación, generando una alta demanda de camas y cuidados críticos.
Jóvenes y motos: el grupo más afectado
La población más afectada es la de jóvenes entre 25 y 34 años, que concentra el mayor número de casos. En cuanto a los modos de transporte, el 69,6% de las personas lesionadas circulaba en moto, seguido por automóviles (11,4%), bicicletas (9,4%), peatones (8%) y transporte público (1,2%).
En este punto, el informe advierte una baja adherencia a las medidas de seguridad: solo el 50% de los motociclistas utilizaba casco, ninguno llevaba chaleco reflectante y apenas el 35% de los ocupantes de autos usaba cinturón de seguridad al momento del siniestro.
Consecuencias evitables
Entre enero y noviembre de 2025 se registraron 17 fallecimientos por siniestros viales en el HIGA, sin contabilizar a las víctimas que murieron en el lugar del hecho. La mayoría de las muertes correspondió a usuarios de motocicletas. A su vez, en base a estimaciones de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y organizaciones de la sociedad civil, entre 35 y 50 personas por año podrían quedar con algún tipo de discapacidad permanente o moderada como consecuencia de un siniestro vial en el distrito, una dimensión del problema que suele permanecer invisibilizada.
Zonas críticas y prevención
El relevamiento permitió identificar 16 intersecciones con más de tres personas lesionadas, muchas de ellas ubicadas sobre corredores troncales como Avenida Juan B. Justo, Colón, Champagnat y Arturo Alió, lo que refuerza la necesidad de intervenciones de infraestructura, señalización y control focalizado.
Al respecto, el concejal Diego García (Unión por la Patria) sostuvo que “los datos muestran con claridad que la inseguridad vial no es una percepción, es una realidad que golpea principalmente a los jóvenes y que tiene consecuencias graves para toda la comunidad”. Y agregó: “Sin información pública actualizada no hay planificación posible. El Municipio tiene que volver a producir y difundir datos, y asumir un rol activo en la prevención, la educación vial y el control”.
Finalmente, García remarcó que “hablar de seguridad vial es hablar de cuidado de la vida. No alcanza con reaccionar después del siniestro: hace falta una política integral, sostenida y basada en datos reales”.

