Durante la mañana de este lunes, un hombre y una mujer de 33 y 42 años respectivamente, empleados de la sucursal de Citroën ubicada en la avenida Constitución y Monseñor Zabala, denunciaron al personal de la comisaría séptima que se encontraban trabajando cuando fueron sorprendidos por un joven.
En su declaración, manifestaron que el sujeto los amenazó utilizando un arma de fuego, les sustrajo dos teléfonos particulares, tarjetas de crédito junto con documentación personal y se dio a la fuga.
En horas del mediodía, el mismo joven, de 21 años, ingresó al supermercado Carrefour, ubicado a metros del concesionario, donde intentó llevarse sin abonar una botella de whisky.
Tras ser interceptado por la seguridad privada del lugar, el sujeto apuntó con un arma a un empleado de 54 años y huyó a pie. Minutos después, a 100 metros, en la avenida Constitución 7349, un hombre de 63 años, empleado de Ripsa, activó el botón antipánico para comercios provisto por la Secretaria de Seguridad del municipio, debido a la conversación con un cliente del cyber.
Los efectivos de la Policía Local arribaron al local para tomarle declaración al denunciante, quien manifestó que un joven se encontraba usando una PC y le solicitaba a otro que se haga presente en el lugar, con el objetivo de robar en el local.
Finalmente, los uniformados realizaron la aprehensión del cliente denunciado, de 21 años, quien tenía en su poder los elementos sustraídos a las víctimas, 2 teléfonos, documentación, y una réplica de un arma de fuego.
Cabe mencionar que el aprehendido posee procesamientos por robo (3 hechos), amenazas, daño, encubrimiento y disturbios en la vía pública.
Puesto en conocimiento, el Dr. Fernando Berlingieri, de la UFI N° 14, (robo a comercios) dispuso que se notifique al aprehendido por robo agravado por el uso de arma de utilería y determinó que se lo traslade a la Unidad Penal N° 44 de Batán.